Somos especialistas en la venta de terrenos, la venta es muy diferente a otros inmuebles y hay que conocer muy bien el terreno, sus normativas y saber asesorar bien al propietario, como conocer bien el negocio o mercado en particular.
Una parcela de terreno puede tardar mucho tiempo en venderse si lo hace una inmobiliaria NO especializada... y es que NO hay demanda para terrenos que están mal valorados o sobrevalorados por utilizar métodos de tasación erróneos (utilizados para otro tipo de inmuebles, como los comparables que pueden ser buenos para viviendas) y NO se cuente con la documentación adecuada. NO se analiza cuál es su mejor uso o destino posible. NO se estudie su volumen y capacidad constructiva real. NO se realice un proyecto afín, con costos reales y evaluación económica y financiera que determine un Resultado o Beneficio Concreto. Entre otros muchos otros factores y variables como el contexto y/o la negociación efectiva con los actores participantes, o estructuración jurídica del negocio de la venta.
Pues todo eso es lo que hacemos, ofrecer un TERRENO CERTIFICADO. Para la toma de decisión. Además de llevar adelante la comercialización e inverssión necesaria que nos garantice la venta. Sabemos que el terreno es el núcleo del negocio, un bien escaso. Define renta y precio del m².
Según las posibilidades que el mercado ofrece. En principio se elige la zona. La zona define el tipo de público y demanda, no hay un criterio único para buscar un terreno, sino que buscamos satisfacer una demanda insatisfecha y otros factores que influyen en la toma de decisión, como el producto inmobiliario y sus valores de venta y/o alquiler (no es igual viviendas que oficinas u otros usos). También están los factores críticos, asociados a su factibilidad, como indicadores urbanos (zonificación, FOT; FOS; LFI, etc), infraestructura disponible, potencialidad de construcción y las características constructivas, entre otros muchos más. Del análisis de todos estos elementos surge la definición del terreno.